Rüdesheim am Rhein


Rüdesheim am Rhein es una ciudad situada en el estado federado de Hesse.
Se encuentra a orillas del Rin y es conocida por sus viñedos y sus vinos.


No hay que perderse la calle Drosselgasse, en el casco antiguo. 
Se cree que fue la primera calle la ciudad y a lo largo de sus 144 metros está llena de restaurantes de estilo antiguo muy decorados. Se puede ir tanto de día para ver el colorido que le dan las flores, como de noche para ver la iluminación. Es ideal para sentarse en la calle cuando hace buen tiempo a tomar algo o a cena y llega la música que se puede escuchar en muchos locales.



Binger Mäuseturm. Es una torre de defensa construida en el siglo XIV como aduana.


Fue destruida durante la Guerra de los treinta años y la Guerra de los Nueve Años en 1689. En el año 1856 se  restauró y sirvió para regular el tráfico de los buques que circulan por el Rhein en esta zona que es estrecha. Con la ampliación del río perdió su función y dejó de usarse pero ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad en el año 2002.


Vista de los viñedos de las laderas, en su mayoría de Riesling, una variedad de uva blanca originaria de esta región.

 
Niederwalddenkmal. Fue construido para conmemorar la fundación del imperio alemán después del final de la Guerra Franco-Prusiana. Se comenzó a construir en 1871 bajo el reinado de Guillermo I y se inauguró en 1883. La obra la llevaron a cabo: el escultor Juan Schilling y el arquitecto, Karl Weisbach.
 

Mide 38 metros de altura y se puede subir hasta esta obra en un funicular donde se aprecian las hileras de vides plantadas a lo largo de la ladera que cae el Rhein.


 Vistas desde el funicular.


 Vistas desde el Niederwalddenkmal del pueblo y del río

 



Los jardines de cuento de Ludwigsburg


Los jardines Blühendes Barock (barroco floreciente) fueron abiertos en 1953 y pertenecen al palacio de Ludwigsburg.

Los jardines tienen como atracción que recrean cuentos y por eso tienen miles de visitantes todos los años. 



Podemos ver la casa de Hänsel und Gretel.
 



Mirarnos en el espejito, espejito mágico donde la madrastra de cenicienta preguntaba ¿quién era la más guapa del reino?.


   
 Intentar coger la coleta de Rapunzel para trepar por la torre y rescatarla.


Ver como llega Caperucita a casa y en la cama está el lobo que se ha comido a su abuelita.


Podemos disfrutar de otros cuentos como el lobo y las siete cabritillas, el gigante Goliat que nos habla desde lo alto, etc... Hay representadas hasta cuarenta escenas en total de algunos cuentos que no reconocí como Frau Holle, la mina de oro o el loro que habla.

Tenemos un dragón que nos pide papel (Papiere,bitte!) y cuando le pones un pañuelo en la boca lo aspira, como si lo comiese y da las gracias (Danke!) por haberlo alimentado.

 
Los jardines están llenos de detalles, hay lagos y animales en ellos, tanto peces como aves acuáticas y flores haciendo formas. Es un placer dar una vuelta por ellos en un día soleado pero sin excesivo calor.

Reloj que indica las horas según el canto de cada ave.



El jardín nos permite dar una vuelta en barco por una canal artificial que pasa por algunas atracciones o hacerlo en tren.